Institucionales

Dr. Alberto Torres Presidente de FABA

Estimados colegas:

El 15 de junio se celebra el Día del Bioquímico en recordación de la figura del Dr. Juan Antonio Sánchez con motivo de un nuevo aniversario de su natalicio, rendimos así un justo homenaje a quien fuera el principal impulsor de la creación de la carrera de Bioquímica en la Universidad de Buenos Aires.
La conmemoración del Día del Bioquímico se ha constituido, de un tiempo a esta parte, no sólo en un motivo de celebración, sino también en un espacio propicio para exponer desde estas páginas algunas reflexiones sobre la realidad que los bioquímicos debemos afrontar en el devenir de nuestro desenvolvimiento profesional, su evaluación y expectativas.
Siendo inevitable hacer referencia a las preocupaciones que nos provoca la actual coyuntura, plagada de incertidumbres y dudas, se entiende procedente abordar en primer término esta ingrata temática, para luego rescatar aspectos mucho más positivos, relacionados con los anhelos y esperanzas de un futuro mejor, sobre la base de la contención y proyección que nos proporcionan nuestras instituciones profesionales.
Así las cosas, y aunque resulte reiterativo señalar que la crisis económica instalada desde principios de año viene provocando una fuerte recesión en la actividad general, lo cierto es que este “parate” se ha visto ahora profundizado por la compulsa electoral que, hoy por hoy, ocupa “monopólicamente” la atención de todos los funcionarios en desmedro del cumplimiento de las obligaciones asumidas con la sociedad en general.
Hoy la Provincia de Buenos Aires tiene más de la mitad de su población activa sin trabajo, o sin trabajo formal, y marginada en el acceso a la gama de posibilidades de desarrollo que debería brindarle y asegurarle el Estado. Y ni qué hablar de la cobertura sanitaria que intenta sostener este Sistema de Salud, sustentado casi exclusivamente con los aportes y contribuciones del sector productivo, donde brilla por su ausencia la presencia del sector público cuyo accionar tendría que ser determinante en estos tiempos de escasez que corren.
Constituye un desafío para todas las instituciones que representan a prestadores de salud, dentro de las cuales la Federación Bioquímica conjuntamente con sus Distritos y Círculos aglutina la mayoría de los convenios vigentes para la prestación de servicios bioquímicos en la Provincia, cubrir ese vacío y propender a la gestación de un modelo que dé inclusión a esa población hoy desprotegida.
Claro está el mérito que cabe reconocer a los profesionales bioquímicos quienes, asumiendo esa insoslayable responsabilidad, hacen esfuerzos permanentes en pos de mejorar el desarrollo de los laboratorios de análisis clínicos, incorporando nueva tecnología y capacitándose en jornadas y cursos de actualización para elevar la calidad de los servicios.
Demás está decir que este inestimable esfuerzo personal debería tener, y todos lo sabemos, un mayor reconocimiento tanto en lo profesional como en lo económico. La época que hoy atravesamos no brinda muchas respuestas en ese sentido, sin embargo, con el soporte de nuestras instituciones –FABA, EMSA y FBA- estamos en esa búsqueda permanente. Los principios solidarios y de unidad que sustentan la representación que ejercen nuestros dirigentes en todos los ámbitos de discusión, nos da la esperanza de consolidar los objetivos logrados hasta el presente y alcanzar un futuro mejor para la familia bioquímica.

Colegas, un cordial saludo con deseos de felicidad para todos.

Dr. Alberto Torres
Presidente de FABA